32. Binah

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Binah
Si me preguntan qué es Binah, digo La Madre. Pero ¿qué entendemos por La Madre? ¿Qué significa esto? Obviamente al referirnos a una esfera del triángulo del espíritu no estamos hablando de mamá y todas las problemáticas psicoanalíticas derivables de la relación con quien nos engendró. La Madre Binah incluye a mamá, y va muchísimo más allá, Binah es la madre de todos, la Madre Naturaleza en su aspecto contenedor, en la sencillez de sus formas, en el peso de sus montañas, en lo nutricia de sus tierras, en el orden de sus ecosistemas y, fundamentalmente, en la fatalidad de sus ciclos. 
Binah está asociado al sentido de la audición, y el título de esta esfera se llama comprensión, implicando con ello la habilidad para examinar el grado de verdad o falsedad inherente en una idea en particular. Job expresa esto como: «el oído examina las palabras». 
La palabra biná deriva de la raíz gramatical ben, que significa «entre». Esta noción de intersticio nos hace pensar en un estado de ser capaz de distinguir cada una de las cosas, y ponerlas en su lugar, sintiéndose a la vez fuera de lugar porque su lugar es estar entre y no en. Y así nos encontramos en una posición en donde no somos poseídos por las cosas, las cosas no nos dan identidad, no nos dicen quienes somos, porque nosotros no somos las cosas; Binah nos ubica en un estado en donde nos sentimos diferentes a todo lo que está a nuestro alrededor, no estamos «en nuestro alrededor», sino «entre nuestro alrededor». Y este estar entre nos diferencia, pero no nos define, porque toda definición de sí mismo es identificarse con algo. Básicamente Binah nos pone en un dilema: ¿Qué soy yo entonces, si no soy esto o aquello?, esta pregunta aunque uno no se la manifieste claramente en el trabajo con Binah comienza de todos modos a bullir lentamente desde dentro. Si yo no soy aquello con lo que me definía, entonces soy diferente, pero esta diferencia no es una diferencia de género o de personalidad, sino mucho más profunda. Es la sensación de «diferente» que nos lleva al contacto con la esencia. Binah nos enseña que la esencia está oculta frente a nuestros ojos, puesto que rebosa en las cosas mismas y no en todo lo que le ponemos a las cosas. De alguna forma Binah nos simplifica mucho la vida. Me gustaría graficar esto con algunos extractos del Alberto Caeiro de Fernando Pessoa:

“Constitución íntima de las cosas”...
“Sentido íntimo del universo”...
Todo eso es falso, todo eso no quiere decir nada.
Es increíble que se pueda pensar en cosas así.
Es como pensar en razones y fines
Cuando empieza a despuntar el día y, donde está la arboleda, 
Un vago oro lustroso va perdiendo la oscuridad.

El único sentido íntimo de las cosas
Es que ellas no tienen sentido íntimo alguno.

No creo en Dios porque nunca lo vi.
Si él quisiera que yo creyese en él,
Seguramente vendría a hablar conmigo
Y cruzaría el umbral de mi puerta
Diciéndome: ¡Aquí estoy!

Pero si Dios es las flores y los árboles
Y los montes, la luna y el sol,
Entonces creo en él,
Entonces creo en él en todo momento,
Y mi vida entera es una oración y una misa,
Y una comunión con los ojos y los oídos.

Pero si Dios es los árboles y las flores
Y los montes y la luna y el sol,
¿Para qué llamarlo Dios?
Lo llamo flores y árboles y montes y sol y luna;
Porque si él se hizo para que lo viese,
Como siendo sol y luna y flores y árboles y montes
Y luna y sol y flores,
Es porque quiere que lo conozca
Como árboles y montes y flores y luna y sol.

Y por eso le obedezco,
(¿Qué más sé yo de Dios que Dios de sí mismo?),
Le obedezco al vivir espontáneamente, 
Como quien abre los ojos y ve,
Y lo llamo luna y sol y flores y árboles y montes, 
Y lo amo sin pensar en él,
Y lo pienso al ver y oír,
Y ando con él en todo momento.

*

¿Dónde está el misterio de las cosas?
¿Dónde está que no aparece
Por lo menos para mostrarnos que es misterio?
¿Qué sabe el río de eso y qué sabe el árbol?
¿Y yo, que no soy más que ellos, sé algo de eso?
Siempre que miro las cosas y pienso en lo que los hombres piensan sobre ellas,
Me río como un arroyo que suena fresco contra una piedra

Porque el único sentido oculto de las cosas
Es que ellas no tengan ningún sentido oculto.
Más extraño que todo lo extraño
Y que los sueños de todos los poetas
Y los pensamientos de todos los filósofos,
Es que las cosas sean realmente lo que parecen ser
Y no haya nada que entender.

Sí, he aquí lo que mis sentidos aprendieron solos:
Las cosas no tienen significación, tienen existencia.
Las cosas son el único sentido oculto de las cosas.

*

No basta abrir la ventana para ver los campos y el río.
No alcanza con no ser ciego
Para ver los árboles y las flores.
También hace falta no tener ninguna filosofía.
Con filosofía no hay árboles: sólo hay ideas.
No hay nada más que cada uno, solo como un sótano.
No hay nada más que una ventana cerrada, y todo el mundo afuera;
Y un sueño de lo que podría verse si se abriera la ventana,
Que no es nunca lo que se ve cuando de veras se la abre.

¿Qué puedo agregar yo después de esto, quién puede agregar algo después de esto? Pero a la luz de la comprensión sobre Binah estoy obligado a agregar algunas explicaciones. Ver y oír, sin filosofía, es comprender, y comprender es Binah. Y si sabemos comprender vamos a saber comprendernos, y si sabemos comprendernos vamos a saber contenernos, y en ese momento habremos integrado a La Madre dentro nuestro, a La Madre nutricia y protectora. Cuando se habla no se comprende, cuando se piensa no se comprende, sólo cuando se es y se acepta eso en uno y en los demás, ahí habremos accedido a la Comprensión.
Hay muchas cosas sobre Binah que se dicen y no estoy siquiera nombrando, y esto es porque son todas derivadas de la falta de entendimiento de lo explicado arriba. Se dice que Binah tiene que ver con la limitación, no, Binah no es limitación, sino que nosotros vemos limitación en la simpleza, porque no sabemos ver lo complejo en lo simple. Se dice que Binah tiene relación con la esterilidad, no, Binah no es esterilidad, sino que nosotros vemos esterilidad en la naturaleza porque sencillamente no aprendimos a verla. ¿Encerramiento? No, Binah no es eso, sino que nosotros percibimos como aislamiento la comunión con nosotros mismos. ¿El deber ser? No, Binah no es eso, sino que nosotros aprendimos más a ver leyes y esquemas inventados, que las leyes de lo natural, y de lo que se nos presenta, aprendimos a proyectar leyes por todos lados. El hecho de que se caiga una manzana no me dice ni me muestra la ley de la gravedad. ¿Soledad? No, Bnah no es eso, sino que nosotros somos adictos a la compañía del murmullo mental propio y ajeno. Cuando se acceden a los poderes de Binah, muchas son las cosas que pasan, que cada uno debe descubrir por sí mismo. 

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